Aprovecho que me han prestado la publicación realizada por Joan Vidal Ollers (Campos 1913 – 1989) en al año 1987 sobre los molinos de viento, para publicar en este post algunos datos de interés que se incluyen en el libro y que nos ayudarán a comprender mejor la importancia que tuvieron en el desarrollo agrícola de Campos, en especial los  «de Ramell» utilizados para la extracción de agua.

molins de vent i de ramell a campos

Para presentar los molinos de viento de Campos, hemos de empezar diferenciando los molinos para moler grano y fabricar harina  (Molins de Vent) de los destinados a extraer agua de un pozo (Molins de Ramell), aunque no entraremos a valorar  características técnicas en este escrito.

En la história de Campos ha habido 33 molinos destinados a moler grano, de ellos 31 eran de viento y 2 de «sangre», es decir, que se movían por tracción animal.

A pesar de las dificultades documentales para precisar el año de su construcción en la mayoría de los casos, D. Joan Vidal consigue establecer en su estudio unos periodos que van, como mínimo, del año 1644 («Es Molí Negre») al año 1853 («Molí de Son Xorch»). Podemos pensar que a finales del siglo XIX y  primeras décadas del siglo XX  había 33 molinos moliendo grano. El último que dejo de trabajar fue el «Molí d’En Majora» en el año 1933. La causa determinante fue la introducción del motor eléctrico. En el año 1912 se montó en Campos la primera Central Eléctrica (Carrer Santanyí, donde hasta hace poco se ubicaba el Cine Moderno «Es Modern»).

molins de vent i de ramell a campos 2

Por otra parte, el «Molí de Ramell», destinado a la extracción de agua, en el que nos centraremos en este escrito, debe su invención a «Mestre Damià Rexach» («En Damià dels Molins») que nació y vivió en el Molinar de Palma. Aunque no se puede constatar la fecha exacta del primer molino «de Ramell», parece ser que fue el que se instaló donde se ubicaba el edificio GESA, delante del Portixol, en una finca llamada «Sa Torreta», alrededor del año 1854.

Rápidamente se levantaron otros molinos  y según consta en un escrito del archiduque Lluís Salvador (Vide: «DIE BALEAREN»), en el año 1872 ya habia 36 molinos en el término municipal de Palma. Y Pere de l’Alcàntara Penya cuenta 200 molinos «de Ramell» en el año 1891.

Solo seis años después de su invención la fama del inventor y sus molinos llegó a Campos, con tierras de condiciones similares a las del Pla de Sant Jordi. En el año 1956 D. Toni Mulet Gomila publicaba el libro «DE RE AGRICOLA – L’HORTA DE CIUTAT – DAMIÀ REXACH» y hablando de «Damià dels Molins», de la aceptación de su invento en Mallorca y de su rápida difusión, en la página 56 dice literalmente: «Por aquellos días fue a Son Xorch de Campos, en donde instaló el fruto de su ingenio, allá por el año 1860«. Por tanto, D. Joan Vidal establece que el primer molino de «Ramell» que se instaló en Campos fue construido por el mismo inventor.

moli vent campos

El éxito del molino de «Son Xorch»  animó a montar otros en los que posiblemente se implicaron ya carpinteros de Campos como «Mestre Sebastià Roca» y «Mestre Damià Beca» (padre de D. Joan Vidal Ollers). El archiduque Lluis Salvador en su «DIE BALEAREN» del año 1872 relata el funcionamiento de cuatro molinos «de Ramell» en Campos.

No obstante, a principios de siglo XX Campos era un pueblo pobre. La gente soñaba con emigrar a América por la falta de trabajo y estímulo. En el mismo cuaderno de trabajo «Mestre Damià Beca» tuvo la ocurrencia de anotar el día y mes de los años 1905 y 1906 que tanto personas solas como familias enteras salieron de Campos hacia Buenos Aires, dato más que interesante para comprender cual debía ser la situación de Campos en aquella época . Su hijo, D. Joan Vidal en su publicación da los nombres y hace el recuento: 101 personas de 40 familias distintas en 1905 y 14 personas más en 1906.

El año 1913 fue fatal para los intereses agrícolas de Mallorca en general y de Campos en particular, ya que no llovió. Aún así marco un punto de inflexión y la gente de Campos empezó a espabilar. Si no caía agua del cielo se hacía necesario sacarla del subsuelo. Así en el año 1914 el mismo «Mestre Damià Beca» instaló 14 molinos. Hasta mayo de 1930, fecha de su muerte, fabricó e instaló unos 75 molinos, incluyendo los dos que montó en Ibiza en el año 1921.

paisaje del campo tipico de Campos

Continuando con datos estadísticos, el cronista de Campos Miquel Roig Adrover establece en sus notas que en el año 1941 había 557 molinos «de Ramell» funcionando en Campos. Y después de la electrificación rural del municipio de Campos, en el año 1966, entre motores y molinos, pasaban de 1.500 el número de pozos del que se extraía agua para riego. Es decir, en pocos años se multiplicó por tres el número de pozos, pero nadie puede precisar por cuanto se multiplicó el número de metros cúbicos de agua extraída, ya que los motores eléctricos podían funcionar a todas horas todos los días.

La electrificación fue un gran avance para conseguir agua en abundancia, aunque también marcó no solo el declive de los molinos, al perder toda su importancia económica, sino que fue también el detonante de la salinización de muchos de estos acuíferos. Daños irreparables, hasta la fecha,  en una amplia  mayoría de ellos.